sábado, 18 de abril de 2009

Instrucciones para dejar de fumar



Cerca de usted fuma la anciana. Mírela bien: su mirada parece perdida y de su boca desdentada surgen volutas de humo. Las puntas de sus dedos parecen pétalos amarillentos y crujientes y usted no desea acabar así.
Todo sea por sus pulmones.
Acérquese sigilosamente y arranque el pitillo de esos dedos marchitos; arrójelo al piso y destroce el cilindro letal con la punta del zapato.
Ahora tome esa blanca cabecita, ponga su antebrazo bajo la barbilla arrugada y temblorosa; con la otra mano gire bruscamente ese cráneo de cartón y rompa el cuello. Perfecto: eso es precisión.
Ya está en la ruta que conduce a la eliminación de ese vicio tan feo.
Descanse.
Reponga energías. Mañana prosiga su cruzada, aún quedan más fumadores en el mundo. JLV

4 comentarios:

JP dijo...

-- maestro JL, segui las intrucciones pero la cabeza ya en el piso seguia fumando y pidiendome un cenicero, que hago maestro?!

JLV dijo...

Hola JP:
Podría usted pegarle en la frente un parche de nicotina... podría funcionar.
Saludos y gracias por leer.

Anónimo dijo...

Presición, es lo único que necesitamos para acabar con ese vicio. Y nada más

Saludos

JLV dijo...

Hola D:
Sí, tienes toda la razón, precisión ante todo.
Saludos y gracias por leer.