sábado, 25 de abril de 2009

Mariposas amarillas


El ornitólogo se enorgullecía de su colección de insectos, pero sobre todo de esas mariposas que --cuando amó intensamente -- revoloteaban dentro de su estómago y a diario salían volando por su boca como párpados amarillos de tuerto rencoroso. JLV

2 comentarios:

Anónimo dijo...

aaaaaaaaahhhhhhhh que cursiiiiiiiiii!!!

Ahora si, dejando de lado el momento femenino. Nunca sentí esas benditas mariposas, ¿estaré fallado o nunca habré amado?

Saludos

JLV dijo...

Hola D:
Dejad que la cursilería nos toque de vez en vez. Y bueno, esas mariposillas son una leyenda urbana, creo.
Saludos.