Por años usó inútilmente pomadas para calmar la rasquera que descarapelaba su cráneo. Hasta que un ciego vendedor de ungüentos llegó a su hogar y le dijo: Use esto y no sufra más doña Medusa, no es caspa lo que tiene, sólo que su cabello siempre cambia de piel. JLV
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3 comentarios:
PAra todo hay una explicación racional. Incluso para... ¡la
caspa!
Saludos
D:
Hay hojuelas grisáceoblanquecinas, crujientes y animosas desvinculadas del pityrosporum ovale. A cabello serpentino, lavado matutino.
Saludos.
Medusa com caspa! Hilário!
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